Un trocito de....

"Quizá tuvieran razón en colocar el amor en los libros... Quizá no podía existir en ningún otro lugar" Willian Faulkner


viernes, 22 de junio de 2018

Nanorrelato Nº 511. Por eso...


Entró en la jaula. El guardia la miró con aire de extrañeza ya que era la única niña que ni lloraba ni gritaba desesperadamente: Papá, mamá, papito o mamita, por poner cuatro de los más escuchados. Se sentó en una esquina. Volvieron a abrir la puerta y el policía, un chico pelirrojo y de color azul claro sus ojos, le volvió a preguntar su nombre y el de su padre. Ella sacó un papel arrugado de la barriga del oso de trapo que se agarraba a su bracito con tanto miedo como su dueña a él. El rojizo muchacho pensó que la chiquilla era sordomuda y que por eso le enseñaba el papelito tan bien custodiado. Leyó. “En CONGRESO, 4 de julio de 1776. Sostenemos como evidentes por sí dichas verdades: que todos los hombres son creados iguales; que son dotados por su Creador de ciertos derechos inalienables, que entre éstos están la Vida, la Libertad y la búsqueda de la Felicidad”
«Ustedes lo escribieron, señor Agente. Por eso hemos venimos acá, dice mi papito»
El azul claro de los ojos del muchacho se oscureció presagiando la más terrible de las tormentas.


2 comentarios:

  1. Un relato de plena actualidad, que incide en un problema que no se sabe o, más bien, no se quiere encauzar como debiera. Triste y real.
    Un abrazo, Pedro

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