Un trocito de....

"Quizá tuvieran razón en colocar el amor en los libros... Quizá no podía existir en ningún otro lugar" Willian Faulkner


sábado, 5 de febrero de 2011

Nanorrelato nº 31. Los peldaños

Bajó las escaleras rápidamente, aunque eso sí, parándose en todos lo rellanos y mirando ansiosamente cada una de las puertas, las cuales le regalaban su mejor perfil. Una vez abajo contempló el portal, el cual sólo le ofertó silencio dada la extrema educación y discreción que lo caracterizaban. Y con la misma tenacidad demostrada en la bajada, repitió lo mismo pero en sentido contrario. Y pasó el tiempo. Y envejeció. Y bajó por última vez. Y fue consciente. Y una vez abajo, el portal afirmó:
    Bueno, ha tenido usted una vida muy feliz.
    ¿Yo? Pero si me la he pasado parándome en todos los rellanos deseando que alguna vez se abriese alguna puerta para entrar.
    ¿Cómo? Pero… ¿no se ha fijado usted nunca en las escaleras?

2 comentarios:

  1. Oye, es estupendo, me ha encantado, Pedro.
    Me gusta tu blog. Sencillo, bien "plantado"; sin adornos que entorpezcan la lectura.

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  2. Las puertas mejor derribarlas, ¿no crees?. tino

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