Érase una vez un hombre que le culpaban de seguir siendo un niño. Érase una vez un niño al que le hablaron como a un hombre. Érase una vez un hombre que deseaba ser cualquier cosa menos un hombre. Érase una vez un niño que no veía el momento de convertirse en hombre. Érase una vez un niño que lloraba como un hombre. Érase una vez un hombre que le daba vergüenza llorar como un niño. Érase una vez un niño y un hombre. Érase una vez un hombre y un niño. ¿Quién de los dos se atrevería antes a hacer lo que tendría que hacer? (¿o quizás es lo que debería hacer?)
No hay comentarios:
Publicar un comentario