Tendrás que operarte. Así
no puedes seguir -le dijo a su mujer viendo que era incapaz de leer-. Que te
crees que no me doy cuenta que desde hace mucho tiempo solo ves las fotos de
las revistas; bueno, veías, que me parece a mí que ya ni eso, porque casi ni las
abres ¡Con lo que te ha gustado tanto leer y cotillear! Y te lo digo por ti,
porque estás muy bien de cabeza y aunque la reuma te impide moverte todo lo que
te gustaría, que siempre fuiste una polvorilla; pero salvo eso todo está en su
sitio, añadió mirándole las tetas y guiñándole un ojo. Y ahora te lo digo por
mí: a mí no me fastidies más que necesito volver a ver esa mirada de…, de eso,
que me volvió loco desde el primer momento. Que yo creo que a mis ochenta y
cuatro años me merezco conservar eso. Así que ¡Eah! a operarte esos ojos y a
mirar…, como siempre me has mirado. Y no
tengas miedo que ya he preguntado y casi no hay riesgo aunque seas una abuela…,
con todo en su sitio, eso sí.
Un trocito de....
"Quizá tuvieran razón en colocar el amor en los libros... Quizá no podía existir en ningún otro lugar" Willian Faulkner
lunes, 14 de enero de 2019
miércoles, 9 de enero de 2019
Nanorrelato Nº 527. No me rindo
Ha llamado usted a la
empresa X. Si está nervioso diga “uno”, si está tranquilo diga “dos” «UNO». Si
cree usted que el problema que tiene es real diga “uno”. Si piensa
objetivamente que es inventado, fruto de su nerviosismo, diga “dos” «UNO y DOS». Si está angustiado diga “uno” y
si esa angustia proviene, como antes se le ha preguntado de algo que usted se
imagina pero que no tiene una causa real, diga “dos” «DOS y UNO». Ahora se le
pasará con un operador, aunque ya se le avisa que para los problemas inventados
la plantilla es muy pequeña, porque en esta empresa nos preocupamos de
problemas verdaderos. Nos interesa solucionar y no perder el tiempo en cosas
ñoñas. Cuando termine el operador, si es que en algún momento queda alguno
libre, le pediremos que nos valore. « ¡Ahí te espero, pájaro! Si he llegado
hasta los cien años con una guerra de por medio, hambre y piojos en mi juventud
para parar un carro, y solo tengo un poco el azúcar alto y algo de reuma cuando
hace frío, conmigo no vais a poder, sinvergüenzas.
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