— Lo siento, pero no me voy a tomar la medicación.
— No le acepto ese no. Ya sabe las consecuencias de ello.
— Por eso mismo.
— Ahora no le entiendo.
— No hace falta que me entiendas.
— Mire usted, como su médico, debo de decirle que…
— Y yo, como tú padre, te digo que no.
No hay comentarios:
Publicar un comentario